En la mitología griega, la gigantomaquia describe la guerra que los gigantes, hijos de Urano, sabedores de su fuerza pero ignorantes de la de los dioses, emprendieron contra Zeus para conquistar el Olimpo.
En la tierra, el Madrid, consciente de su buen hacer, ha intentado arrebatar el cielo al Barcelona y, de momento, se ha quedado en las nuves.
Sí, ya lo sé, esto no se ha terminado y el Real Madrid todavía puede remontar, pero como todos sabemos que esto de las fiestas del fútbol va por barrios, hoy me toca festejar.